el despido de 676 empleados hasta 2011, lo que le reportaría un recorte de gastos laborales cercano a los 74 millones de euros, más unos 23 millones que prevé ahorrar para "conservar" el balance de la compañía.
En una primera fase de la reetructuración, Aer Lingus recortará 489 puestos de áreas de operación y de apoyo, que justificó en la caída de vuelos programados y el cambio de "las prácticas de trabajo" para seguir la línea del resto de competidores.
Asimismo, la aerolínea aplicará reducciones de salarios a aquellos empleados con nóminas superiores a los 35.000 euros anuales y eliminará las subvenciones para toda la plantilla.