16.300 millones de euros para fortalecer sus finanzas sin necesidad de ayuda estatal, lo que, de concretarse, supondría la mayor operación de este tipo en el Reino Unido hasta la fecha.
Según informa hoy el diario Financial Times, la intención del banco es fortalecer de este modo su capital para poder retirarse del Programa de Protección de Activos del Gobierno, bajo el que tiene asegurados activos tóxicos por un importe de 282.600 millones de euros, pero que conlleva el pago de unos honorarios de 17.100 millones de euros.