Carlyle detalló que el fundador, presidente y hasta ahora propietario de CVC, Guilherme Paulus, se quedará al frente de la empresa con sede en Santo André (a 25 kilómetros de Sao Paulo), y mantendrá una participación minoritaria en el accionariado.
La transacción, que se cerró a finales de diciembre de 2009, implica también la compra de la actividad de cruceros de CVC.