Para todo el año 2009, la producción industrial experimentó un retroceso del 22,4 por ciento respecto al año anterior, la mayor caída de la historia de este indicador en base al año de referencia actual.
Después de sufrir una caída histórica del 10 por ciento en enero de ese año, la producción industrial japonesa invirtió la tendencia en marzo y desde entonces ha registrado subidas continuadas.