Unos 12 millones de los nuevos desempleados provenían de Norteamérica, Japón y Europa Occidental, informó la Organización Internacional del Trabajo. El número de desempleados se disparó casi cuatro millones en Europa del Este y Latinoamérica, mientras que la tasas de desempleo fueron más estables en Asia, Africa y Medio Oriente el año pasado.
Las cifras señalan la necesidad de un "pacto mundial de empleos" para impulsar el trabajo alrededor del mundo, agregó la OIT.

