La mayor aseguradora de Europa por primas brutas y capitalización de mercado anunció que su beneficio neto del segundo trimestre se redujo un 46% por los menores ingresos de inversiones propias y los mayores costes relacionados con terremotos y otros desastres naturales.
El beneficio neto del segundo trimestre fue de 1.020 millones frente a los 1.870 un año antes y por debajo de los 1.150 que esperaban los analistas.
El beneficio operativo, que muchos inversores consideran mejor reflejo de la evolución real de las operaciones habituales, subió un 23% a 2.190 millones, bastante por encima de los 1.840 que esperaban los analistas.