La recaudación tributaria de julio sumó $37.374 millones, lo que implica un crecimiento del 38,4% respecto de lo ingresado en las arcas fiscales en igual mes de 2009. El alza se debió principalmente a la reactivación del comercio exterior -afectado el año pasado tanto por la crisis internacional como por restricciones impuestas desde el Gobierno-, a la mejora de la actividad económica, a la inflación y a la actualización de los salarios.
En los siete primeros meses de 2010 los recursos totalizaron $229.056 millones, un 32,6% más que en el mismo período del año pasado.
Los impuestos que tuvieron las tasas de evolución más altas son los vinculados al comercio exterior: las retenciones a las exportaciones crecieron un 68,2% y recaudaron $4481,10 millones, en tanto que los de importación avanzaron un 62%, con recursos por $1065,10 millones.