La entidad británica registró en el primer semestre del añoa yun beneficio neto de 2.430 millones de libras, frente a los 1.890 millones de libras que obtuvo en el mismo periodo del año anterior.
Según ha informado la entidad, estos resultados se deben a una disminución de las cargas por depreciaciones de activos y otras provisiones, que se redujeron un 32% a 3.080 millones de libras. Además, ha contribuido la buena marcha de la división de banca de inversión, que entre enero y junio triplicó sus ganancias, hasta 3.400 millones de libras. Los gastos operativos se incrementaron el 21%.