La compañía alemana de suministro energético RWE registró un beneficio neto hasta 2.746 millones de euros en el primer semestre, un 23% más que en el mismo periodo de 2009.
RWE informó hoy de que esta mejora se produjo por el notable incremento de las ventas de gas y electricidad, pero advirtió de que "aumentan los riesgos políticos para los suministradores de energía".
La facturación subió entre enero y junio un 12,2%, hasta 27.354 millones de euros.