La nota emitida desde su central continental en Colonia señala que en casos extremos y muy raros puede darse, debido a vibraciones, fallos en el sistema eléctrico de la servodirección de esos vehículos de pequeño tamaño.
Tras indicar que no se conoce accidente alguno que se haya producido por ese motivo, Toyota señaló que la llamada a talleres tiene carácter preventivo y esta libre de todo coste para los propietarios de los vehículos.
La empresa explicó que en total se han vendido en Europa 70.800 unidades de su modelo de automóvil urbano IQ, 13.600 en Alemania. Con la revisión gratuita de esos vehículos, Toyota desea actualizar el "software" de la servodirección.