El Fondo Monetario Internacional decidió aprobar una línea de crédito flexible por 72.000 millones de dólares durante dos años.
El presidente interino del directorio del FMI, John Lipsky, dijo en un comunicado que este acuerdo permitirá a México protegerse de riesgos externos importantes para los mercados emergentes, tales como "presiones en torno a los flujos de capital y la confianza de inversionistas a escala internacional".
