El Departamento de Justicia de EEUU ha abierto una investigación a Standard & Poor’s sobre la calificación que otorgó a decenas de cédulas hipotecarias durante los años que precedieron a la crisis financiera de 2008.
La investigación, que no se sabe si sólo afecta a Standard & Poor’s o también a las otras dos agencias de calificación, Moody’s y Fitch, probablemente se sustente por la vía civil, y podría desacreditar el trabajo de estas compañías, en las que se defiende que sus analistas actúan con independencia de los intereses de negocio de las agencias.