General Motors Corp. está tratando de convencer a algunos de sus acreedores para que intercambien su deuda por valores, a medida que trata de evitar el tener que acogerse a la protección por bancarrota.
El presidente ejecutivo de la firma, Rick Wagoner y sus asesores trabajan para diseñar el plan de negocios que tienen que presentar al Congreso estadounidense para el martes. El plan necesita probar que la empresa puede seguir siendo una compañía viable en medio de las oscuras condiciones del mercado actual. GM argumentará que un préstamo a corto plazo del gobierno.
El plan, que aún no ha sido aprobado por la junta de GM, incluiría detalles sobre cómo GM aligeraría sus deudas sin la protección de la corte de quiebras, dijeron las fuentes.
La carga de deuda de GM, calculada por J.P. Morgan en $43.300 millones, con intereses de $2.900 millones anuales, ha sido uno de los principales culpables del deterioro de la empresa en los últimos años. Muchos analistas han sugerido que GM necesita acogerse a la protección contra la bancarrota para forzar a sus acreedores a renegociar.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
0 comentarios:
Publicar un comentario