La institución, que presentó hoy el capítulo primero de su informe sobre estabilidad financiera global, destacó también que España ha practicado un sistema de provisiones "dinámico" que ha permitido a los bancos acumular "grandes provisiones" durante el periodo anterior a la crisis, con lo que constituye una excepción a la tónica general del sistema, que presenta una baja cobertura de provisiones ante la evidencia de que "los préstamos fallidos se incrementan a mayor ritmo que las reservas crediticias".
El FMI reitera, no obstante, que uno de los riesgos que pesa sobre la economía global es la continuidad de la debilidad del mercado inmobiliario, y cita a España, junto con Irlanda y Reino Unido, como uno de los mercados con mayores presiones, que han sufrido "significativos descensos de precios".

