Sin duda, las economías de América Latina se encuentran en una posición de más fortaleza para afrontar la crisis financiera global que en ocasiones anteriores: la mayoría de los países tienen superávit comercial, fuertes reservas monetarias y un déficit fiscal saludable.
Pero la combinación de una desaceleración global con la caída en los precios de las materias primas amenaza con revertir la tendencia reciente al crecimiento.
El Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional ya han modificado las perspectivas de crecimiento de la región para 2009. Existe preocupación sobre la posibilidad de que los gobiernos tengan que recortar sus gastos en salud, educación y planes de erradicación de pobreza.
¿Podría entonces China mitigar estos efectos?
Después de todo, en los últimos diez años muchos países, especialmente en Sudamérica más que en América Central, han diversificado sus socios comerciales para incluir al gigante asiático.
En 2000, el comercio entre América Latina y China alcanzaba los $13.000 millones; el año pasado fue de $103.000 millones.
Materias primas
China ha estado comprando cantidades masivas de las materias primas sudamericanas para satisfacer su economía en auge, que el año pasado creció un 13%: soja y mineral de hierro de Brasil; soja y oleaginosas de Argentina; cobre de Chile, estaño de Bolivia, y petróleo de Venezuela.
En 2007 las exportaciones totales de América Latina equivalieron a $715.000 millones, de los cuáles sólo $51.000 millones -o 7%- fueron a China.
China es ahora el principal mercado de exportación de Chile y el segundo de Perú. Es el segundo socio comercial más importante de Brasil -después de Estados Unidos- y el tercero de Argentina.
Sectores
Para los países latinoamericanos, es importante cuáles sectores de la economía china seguirán creciendo, y a qué ritmo. La demanda de mineral de hierro ya es vista como volátil. La demandas de cobre depende de cuán rápido China quiere avanzar con el proceso de llevar electricidad a todo el país.
Pese a una serie de acuerdos muy publicitados entre el presidente venezolano, Hugo Chávez, y el gobierno chino, Venezuela exporta sólo 250.000 barriles de petróleo por día a China, comparado con el 1,5 millón de barriles que envía a Estados Unidos
Argentina y Paraguay son particularmente vulnerables a una caída en la demanda de soja. Desde julio, los precios de la soja han disminuido desde los $16 a los $9 por celemín, en parte debido a una cosecha récord en China y a un descenso en las importaciones chinas.
Chile sería afectado por una menor demanda de cobre de China. El cobre aumentó un 700% entre 2001 y mediados del 2008, pero ahora está su precio está bajando.
Perú definitivamente será ayudado por la creciente demanda china por sus minerales. Gran parte de su rápido crecimiento se debe al interés en su sector minero, principalmente de parte de inversores chinos.
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