Empleando una metáfora relacionada con el cáncer, el presidente de la Asociación Española de la Banca, Miguel Martín, ha comparado la crisis con una metástasis y ha explicado que la quimioterapia que se ha de aplicar a "la avanzada enfermedad va a tener efectos colaterales muy duros".
"Nos están equiparando situaciones distintas". Este es el principal escollo del que se ha lamentado el presidente de AEB al reflexionar sobre el rumbo del sistema financiero español si se intentan aplicar las mismas medidas que en Estados Unidos.
Todas las modificaciones que se han planteado en la cumbre financiera celebrada recientemente en Washington, van encaminadas a "alienar los agujeros del sistema financiero" pero, a juicio del presidente de AEB, "nuestro caso es distinto". Para el ex director del Banco de España, dentro del G-20 se aplicarán medidas que a España no le corresponden. De hecho, para empezar, la prioridad a la hora de paliar los efectos de la crisis ha sido salvar el sistema, no la competencia. Justo el caso español, cuenta con un sistema que no hay por qué rescatar y que ha demostrado "poder aguantar perfectamente las reestructuraciones inmobiliarias más importantes".
Para el ex director del Banco de España, dentro del G-20 se aplicarán medidas que a España no le corresponden
Según el panorama descrito por el presidente de la AEB, los efectos colaterales de la solución a esta crisis "serán muy duros". El que más, este de la nacionalización de los bancos, porque genera unos niveles de incertidumbre inmensos: "Es un retroceso muy grande que nos puede penalizar más a España por la incertidumbre que genera". Martín ha explicado que se dice que son medidas temporales, "luego cabe pensar que se espera una salida del problema", pero se le aplican soluciones que no tienen pinta de ser pasajeras. El cómo, cuándo y en qué términos abre la puerta a un abismo de cuestiones sin resolver. Es una gestión que da más rienda suelta a la crisis de confianza.
El Banco de España hace una supervisión individualizada y cada entidad conoce de qué pie cojea. Según Martín, "esta es la única forma de poder hacer supervisión". El presidente de la CNC reconocía ayer que las ayudas públicas que están articulando los distintos gobiernos de todo el mundo contra la crisis financiera internacional son necesarias para sostener la economía, pero también criticó que pueden beneficiar a las entidades menos eficientes, en detrimento de los que han actuado correctamente.En su comparecencia en el Congreso resaltó que aunque "ningún Estado puede permitir que se le hunda el sector financiero" ahora puede darse la impresión de que el "paraguas" del capital público acoge a aquellos que "no han actuado del todo correctamente".
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