La caída en la zona euro fue la más débil del año pasado, además, fue menor de lo previsto por el mercado. Los analistas esperaban de media un descenso del 0,6%.
Un total de 583.000 ciudadanos de la Unión Europea (UE) perdieron su empleo en ese periodo.
En España, la caída del empleo durante los últimos meses del año fue menos intensa que en los tres primeros trimestres de 2009, cuando se registraron descensos del 2,5, 1,3 y 1,5%, respectivamente.